30 septiembre 2007

Frecuentación de discotecas, un factor de riesgo de asma

La frecuentación de discotecas es un factor de riesgo de asma en los adolescentes, mientas que el tabaco sigue siendo la principal actividad que favorece la enfermedad, según un estudio alemán que será publicado en el Diario Europeo de Neumología en octubre.

Christian Vogelberg, del hospital universitario infantil de Dresde, en Alemania, estudió los vínculos entre el modo de vida y las actividades de ocio de adolescentes de entre 16 y 18 años y la aparición de síntomas asmáticos.

De los 2.910 adolescentes que participaron en la investigación, efectuada en forma de cuestionario, 330 (un 11,3%) dijeron haber sufrido, durante el año anterior, al menos un episodio de sibilancias o silbidos en el pecho, uno de los síntomas de la enfermedad.

Entre las actividades practicadas, el tabaco es el principal factor de riesgo. Así, la tasa de nuevos asmáticos alcanza el 19,2% entre los fumadores, frente al 7,5% de los no fumadores.

Respecto a las actividades de entretenimiento, "la frecuentación de discotecas figura de entrada como un factor de riesgo de asma", destaca Christian Vogelberg.

La proporción de jóvenes que ha sufrido silbidos en el pecho es del 12,9% entre los asiduos de las discotecas, mientras que dicho porcentaje es del 9,9% entre los demás.

La diferencia, según el investigador, es "estadísticamente significativa".

Por el contrario, el estudio demuestra que el riesgo de desarrollar síntomas asmáticos es menor entre los adolescentes que practican deporte, y también entre los "adictos" a la informática.

Dentro de los jóvenes que practican deporte más de tres veces en semana, la proporción de aquellos que han padecido silbidos en el pecho es del 8,2%, mientras que entre los adolescentes que sólo se ejercitan una vez al mes o menos el porcentaje es del 13,9%.

En la categoría de los que pasan más de una hora al día delante del ordenador, aquellos que han padecido sibilancias son el 8,8%, frente al 12,2% de los demás.

El Diario Europeo de Neumología es la publicación oficial de la Sociedad Europea de Neumología.

21 septiembre 2007

La nueva generación es más obesa y vivirá menos

La obesidad se ha convertido en uno de los grandes males modernos. Somos cada vez más ricos, comemos cada día más y nuestros hijos pagarán un precio por ello. Y un precio terrible: vivirán menos.

La obesidad ataca a los países desarrollados y los niños no se quedan fuera. Los expertos hacen un llamamiento al raciocinio y abogan por luchar contra una epidemia que acorta la esperanza de vida de una generación.

"Hemos creado un generación joven que está a punto de tener peor salud y unas menores expectativas de vida que las de sus progenitores. Pero todavía se puede arreglar", señaló S. Jay Olshansky, profesor de Epidemiología de la Universidad de Illinois en Chicago (EEUU).

Este entusiasta de la longevidad -ha escrito mucho sobre cómo prolongar la vida humana- explica que la actual estructura del organismo humano no permite la supervivencia eterna.

La salud de los niños obesos puede verse afectada de distintas maneras y acabar disminuyendo su esperanza de vida. Hipertensión, altos niveles de triglicéridos y colesterol, mala tolerancia a la glucosa, diabetes tipo 2 y síndrome metabólico, son algunos de estos trastornos.

"Estamos en la fase en la que aumenta la obesidad y luego surgirán los problemas relacionados con este trastorno. En la tercera y última etapa, que se espera que tenga lugar en los próximos 50 años, podríamos ver una marcada reducción en las expectativas de vida", subraya Olshansky.

"En un futuro, las naciones más sanas serán las más ricas [...] Antes, se trataba de reducir las enfermedades parasitarias y la mortalidad materna pero ahora hay otros problemas, como los cardiovasculares", concluye.

Vía: Periodista Digital

07 septiembre 2007

Delfín "baiji" extinguido de la tierra

Después de seis semanas de busquedas en las aguas del rio Yangtze, expertos han señalado que probablemente el delfín "baiji" ha desaparecido de la tierra, tal como lo habia revelado el pasado 7 de julio la revista "Biology Letters".

A bordo de un barco, una expedicion cientifica internacional partió en noviembre de 2006 en la busqueda de las ultimas especies del delfín "baiji", con la esperanza de obtener algunos y ponerlos en una zona protegida.

En los años cincuenta del siglo pasado, la población de este delfín, una especie única del Yangtze, era de miles, pero disminuyó con los años mientras China se modernizaba y empezaba a utilizar el río para la pesca, el transporte y la generación de electricidad, añade los científicos.

Sam Turvey, del ZSL y uno de los autores del análisis, calificó la extinción de "trágica". "El delfín del río Yangtze -explicó- era un mamífero increíble que se separó de otras especies hace más de veinte millones de años".

Según los expertos, este delfín es el primer cetáceo que desaparece de la Tierra como resultado directo de la influencia del hombre, debido a una pesca desregulada.

"La extinción representa la desaparición de una rama completa del árbol de la evolución de la vida y hay que poner énfasis en que tenemos que asumir la responsabilidad sobre nuestra labor como guardianes del planeta", añadió.

05 septiembre 2007

Descubren colmenas de la época del Rey Salomón

Una serie de colmenas de la época del rey Salomón, las primeras de este periodo descubiertas hasta ahora en Medio Oriente, fueron halladas recientemente al norte del valle del Jordán.

“Se trata de las colmenas de miel más antiguas conocidas hasta ahora”, declaró el profesor Amichai Mazar, del instituto de arqueología de la universidad hebrea de Jerusalén.

“Datan de los siglos IX y X antes de Cristo”, precisó el profesor, que dirigió las excavaciones en meses pasados en Tel Rehov, en el sector de la ciudad de Beit Shean.

Esa época corresponde a la del rey Salomón y los primeros reyes de Israel.

Las excavaciones establecieron que la apicultura se practicaba en esa zona a gran escala, subrayó el profesor.

El equipo de Mazar descubrió unas 30 colmenas repartidas en tres hileras; en cada una de estas últimas, las colmenas se superponían en tres niveles.

Expertos en apicultura que visitaron el lugar consideraron que la producción de las colmenas de Tel Rehov era de una media tonelada de miel por año.

Las colmenas tienen forma cilíndrica, están construidas en arcilla y paja seca y miden 80 centímetros del altura por un diámetro de 40 centímetros.

Tienen en su parte superior una minúscula apertura para permitir entrar y salir a las abejas. La miel se recuperaba por una apertura en su parte inferior.

En el mismo lugar también se hallaron objetos de culto como estatuillas de diosas de la fertilidad.